LOS MONUMENTOS DE ATENAS
Gracias al impulso que dió Pendes, se vieron surgir en Atenas
una ciudad nueva, templos y monumentos que reemplazaron a los
destruidos por los persas.
Al pie del Acrópolis se levantaban el Odeón y el teatro de Dioniso, el templo de Teseo y el pórtico de Pericles, donde se conservaban las obras maestras de la pintura y representativas de los grandes acontecimientos de la historia nacional.
En el Acrópolis, y en el sitio en que estuvieron los viejos monumentos destruidos, se erigieron los santuarios de la ciudad, obra maestra de la arquitectura griega. Una vasta escalera conducía a la roca sagrada, cuya entrada estaba decorada con el pórtico monumental de los Propileos.
En la meseta se alzaba el templo de Atenea , llamado Partenón que, mutilado y medio hundido, maravilla a les visitadores por la perfección de sus líneas. Más lejos se llegaba al templo del antiguo rey Ereoteo, en cuya tribuna las columnas estaban reemplazadas por estatuas de mujeres, y a la capilla de la Victoria Aptera.
Una estatua colosal de bronce de la diosa Atenea dominaba el Conjunto; otra estatua, ésta de oro y marfil, obra del escultor Fidias, resplandecía en el interior del Partenón. Una multitud de estatuas y Otros monumentos hermoseaban las plazas y las pendientes del Acrópolis. Los mármoles salieron de las canteras del Pentélico, y el tributo de los aliados sirvió para pagar a los artistas.
Teatro de Dioniso
Templo de Teseo
Pórtico de Pericles
Partenón
Erectión
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LA HISTORIA Y SUS PROTAGONISTAS: GRECIA, ROMA Y LA EDAD MEDIA |
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