Biografia: Cleopatra
Cleopatra fue la última reina del Antiguo Egipto y de la dinastía ptolemaica, también llamada Lágida, fundada por Ptolomeo, un general de Alejandro Magno.
Fue la última del llamado Periodo helenístico de Egipto.
Cleopatra era hija de Cleopatra V Trifena y de Ptolomeo XII Auletes, de quien heredó el trono en el año 51 a. C., cuando tenía 18 años, junto con su hermano Ptolomeo XIII, de sólo 12 años, quien sería además su esposo. A Cleopatra se le ha atribuido una belleza excepcional; sin embargo, grabados y dibujos hallados dan testimonio de que su encanto radicaba en su personalidad más que en su aspecto físico.
Vida de Cleopatra
Entre las mujeres famosas de la historia, Cleopatra ocupa un lugar destacado.
En los muros de los templos se grababa su imagen ataviada con insignias iguales a las que habían llevado los antiguos faraones: la doble corona del Alto y del Bajo Egipto, los cuernos y las plumas de Amón y la serpiente real sobre la frente.
La unión entre Julio César y luego Marco Antonio con Cleopatra no fue solo la seducción recíproca que se dio entre ellos, los tres protagonistas eran por sobre todo personalidades políticas, en los tres poderosas razones de Estado se agregaban a la atracción física, y cada uno perseguía en la relación sus propios objetivos.
El objetivo de Cleopatra era muy claro, y a ellos respondió a lo largo de su vida. Presintiendo que el apogeo de Roma marcaba la hora final del reinado de los Ptolomeos sobre Egipto -el último Estado independiente en las costas del Mediterráneo-, apoyó a quienes propiciaban el fin de la República romana y aspiraban a establecer el Imperio.
Sus hijos fueron: Cesarion, Alejandro Helios, Cleopatra Selene II y Ptolomeo Filadelfo.
Muerte de Cleopatra
Los planes de Octavio (su rival) eran tomar a la reina como prisionera y exhibirla en Roma, simbolizando con ello la superioridad y la victoria sobre la humillada enemiga a la que el pueblo de Roma tanto odiaba. Esto impulsaría decisivamente sus aspiraciones políticas. Cleopatra se percató del final que la esperaba tras entrevistarse con Octavio.
Viendo su futuro como esclava, en el reino del que había sido soberana, Cleopatra eligió morir y tomó la decisión de suicidarse. El 29 de agosto del año 30 a. C. se hizo morder por un áspid para morir, por el significado que esa muerte podría tener frente a los ojos de sus súbditos, puesto que una antigua creencia sostenía que la serpiente era el ministro de Amón-Ra, es decir, el dios del sol de la religión egipcia. Antes de fallecer escribió una misiva a Octavio en la que le comunicaba su deseo de ser enterrada junto a Marco Antonio, y así se hizo.
La vida de Cleopatra es muy enigmática y ha cautivado a millones, incluyendo a cinematógrafos los cuales han hecho decenas de películas, hoy en día, existe hasta un juego de casino que lleva su nombre.